Especialistas y técnicos de la Dirección Regional de Cultura de Cusco evidenciaron un empedrado incaico que formó parte del Cápac Ñan, tras el desborde del río Chicón en la provincia de Urubamba, informó el jefe de Sitios y Parques Arqueológicos, Carlos Arriola Tuni.
Se trata de piedras de río compuestas y distribuidas homogéneamente en un área de dos metros de largo por 1.20 de ancho, que apareció paralelo a la cuenca prehispánica por donde fluye el río Chicón, a un kilómetro de la ciudad de Urubamba.
“Al hacer el diagnóstico de posibles daños nos dimos con la sorpresa de este hallazgo, oculto por siglos. En la época prehispánica hubo una articulación directa y con este descubrimiento se pone en evidencia que el camino inca nos conduce al nevado Chicón”, explicó.
En este trayecto, de diez kilómetros, entre el nevado Chicón, se encuentran las comunidades campesinas de San Isidro, Yanacona, Chichubamba y Chicón, que albergan los sitios arqueológicos de Quespihuanca, Cocha Suntur y Erapata.
Este camino inca estuvo oculto, según estimó, alrededor de 500 años, a lo largo de los cuales habría soportado ocho desbordes, el último en 1942.
Adelantó que programarán un sondeo de protección y seguimiento para poner en valor lo encontrado, con el apoyo del gobierno regional de Cusco; además de un presupuesto de emergencia de algunos posibles daños.
“Se va a aplicar una estrategia institucional para ver la puesta en valor del espacio, porque al tener esta evidencia se descubrirán empedrados en otras zonas”, finalizó.